El péndulo hebreo es de madera de haya y trabaja con las “hondas forma” de las letras porque la madera es aislante.                                                                             Su uso se remonta a los primeros cabalistas herméticos, quienes transmitían oralmente este conocimiento. Fue “redescubierto por el radiestesista francés Pierre Heli a principios del siglo XX.
El péndulo se utiliza con un idioma sagrado es decir IDEOGRÁFICO. Existen 2 tipos de idiomas los “solares” o ideográficos que nombran y crean las cosas y los lunares que lo que hacen es describirlas. Los idiomas “solares” nombran la realidad, y son el Sánscrito, el Chino Mandarín, el Árabe, el Quechua y el Hebreo. Los idiomas ideográficos son los que nombran la realidad y representan una idea a través de un dibujo o símbolo (que en griego significa “lo que une”). Es decir, en estos idiomas en muy poco espacio se mete mucha información. El contenido y la explicación del significado están juntos en el símbolo. 

El péndulo se utiliza con palabras en arameo (hebreo antiguo) porque es un idioma sagrado. Una forma de aplicación es optimizar cada zona del cuerpo aplicándole la letra que le corresponde. Cada letra hebrea, genera una vibración específica, las palabras resultantes nos polariza con esa vibración, provocando un cambio de resonancia, de sintonía a niveles sutiles, hasta su densificación en nuestro propio cuerpo.

A menudo, atraemos cosas indeseables hacia nosotros por vibrar en una frecuencia errónea, el Péndulo Hebreo nos ofrece la oportunidad de reequilibrar armónicamente nuestro ser interior. Tiene la particularidad de ser tanto detector como emisor. Por lo cual se puede utilizar no sólo para diagnóstico sino también para tratamiento.

Nuestro campo electromagnético (CEM) sostiene y sustenta nuestra biología.
Las enfermedades aparecen como alteraciones en el CEM antes de manifestarse en el cuerpo físico. Cuando nosotros pasamos por momentos en los que vemos todo negativo o nos sentimos mal emocionalmente, bajamos la frecuencia vibratoria y sin darnos cuenta, atraemos a nuestro campo energías indeseadas o parásitas. También permitimos el ingreso de emisiones negativas (intencionales o no) de otras personas.
Por esto es muy importante trabajar sobre nuestros patrones de pensamiento para ir disminuyendo la posibilidad de atraer energías inarmónicas a nuestro campo.
Con el péndulo hebreo podemos detectar y resolver los desequilibrios en los Campos ElectroMagnéticos de todos los seres vivos.